The Key to Global Success

El nuevo Time to market, Moda 4.0.

En la última sesión de Modaes. Business Foodies estuvieron presente los directivos de algunas empresas como El Ganso, Intropia, Pepe Jeans y Tuc Tuc, donde debatieron cómo en el sector de la moda las fases iniciales de la cadena de valor se han visto transformadas por la tecnología.

Uno de los puntos que trataron fue la integración de los procesos que forman parte de la cadena de suministro, ya que se trata del principal objetivo en el cual debe fijarse las empresas del sector. Fernando Aparicio, director de Amvos y profesor en el instituto de Empresas y ecperto en operación, hizo hincapié en que el nivel de exigencia cada vez es más alto y por lo tanto la integración debe ser lo más perfecta posible. “El consumidor no sólo pide más cosa si, sino también más rápido, los nuevos canales de venta son cada vez más exigentes y la tecnología aplicada puede reemplazar todo lo que conocemos hasta ahora a través de la impresión 3D”, anoto el experto.

Javier San Miguel también quiso argumentar la importancia de la integración, anotando que “La revolución tecnológica ha terminado de destapar las vergüenzas del sector: somo generadores de stock sobrante, hemos vivido de forma cómoda y han aparecido dos modelos que se han aprovechado de esa ineficiente: el fast fashion y los eliminadores de stock”.

Otra de las aportaciones fue la del director corporativo de operaciones de Ternua Group, Aitor Barianga, quién defendió que no se trata de un problema de las compañías, sino del sector. “ Lo que sobra es oferta de mercado, la selección natural va a darse, lo que hay que hacer es estar lo más preparado posible para ser el elegido, hay que aprovechar la tecnología y no repudiarla”, explicó Barianga. Siguiendo con este argumento, Ana Oyón, directora de logística de Tuc Tuc, marcó que “la tecnología lo pone más fácil al haber tantas opciones, pero el consumidor cambia a mayor velocidad, por lo que estamos en un modelo basado en la fiabilidad del cliente

Por otra parte el director de operaciones de Pepe Jeans, Andrés López, quiso replantear el modelo de negocio desde los cimientos, “estamos en un momento ilusionante porque la tecnología nos permite hacer estos cambios rápidamente, el problema va a ser en la forma de transformar estos procesos en poco tiempo, ya que es muy difícil mantener un modelo organizativo mientras el modelo de negocio va cambiando”.

El confundador de Dolores Promesas, Javier Lapeña, explico su desacuerdo “ en nuestra marca, lo principal es el factor emocional, por lo que veo complicado vender antes de producir”. Bajo esta misma línea Ricardo Fraguas, director general de Mirto, aporto que “la moda 4.0 nos está llevando a ser menos personales”.

Maria Selfa, directora general de Ecoalf, quiso aportar la importancia de la sostenibilidad, la eficacia y la diferenciación. “Estamos siguiendo a los grandes con nuestro negocio para tener nuevo stock cada mes y nos estamos equivocando porque este no es un modelo de negocio sostenible” explicaba Marisa Selfa. “ Si seguimos haciendo lo mismo no vamos a encontrar resultados diferentes, que es lo que necesitamos, el consumidor tiene más oferta de las que necesita y se va a cansar”, concluyo la directiva.

La directora de IT, Mónica de Pablos, quiso remarcar que “la tecnología permite viajar a la personalización, por eso hay que entender muy bien quién y cómo es el cliente de la marca, ya que no es el mismo ahora que hace diez años”. Coincidiendo con esta aportación, Berta Escudedor, consejera delegada de El Ganso concluía con que “ el cliente demanda sentirse especial y vivir una experiencia propia personalizada. Todas las empresas hemos invertido mas en supply chain y en tecnologías en los últimos años, estamos haciendo un gran esfuerzo de planificación”.